LOBOS Y NIÑOS FERALES
Un niño Feral, o “Niño Salvaje”, es un pequeño que vivió alejado de la sociedad por razones circunstanciales, accidentales o por un confinamiento. Dentro de ese grupo están los niños criados por animales. Se conocen casos de infantes que crecieron gracias a la ayuda de pumas, oveja, perros y hasta gallinas. Destacan es especial los criados por lobos.
Los más famosos pertenecen a la mitología romana. Se trata de los gemelos Rómulo y Remo, fundadores de la ciudad de Roma. Hijos de Rea Silvia y del dios Marte, su madre los puso a salvo de la persecución de Amulio, tío de Rea, quien mandó a matar a todos sus sobrinos que pudieran disputarle el trono de Alba Longa. Rea Silvia depositó a los pequeños en una cesta que puso a flote en el Río Tíber. Ésta quedó atorada a la orilla y una loba llamada Luperca recogió a los infantes para protegerlos y alimentarlos con su leche.
Los casos más sorprendentes reportados en Savage Girls and Wild Boys. A history of Feral Children, de Michael Newton, se presentaron en la India, en el siglo XIX. En el libro se menciona el caso de un niño hallado en la madriguera de unos lobos.
“Una noche dos lobos se acercaron sigilosamente al pequeño que descansaba bajo un árbol y lo olieron. Entonces lo tocaron y él se puso de pie, en vez de asustarse, puso sus manos en las cabezas de los animales y comenzaron a jugar. Lo mismo ocurrió la noche siguiente…
Muy probablemente se trataban de sus “hermanos”, los cachorros con los que fue criado cuando lo hallaron abandonado.”
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| Luperca junto a Rómulo y Remo |
